Pero los perros, además de morir hervidos o golpeados como las personas, tienen otra razón para morir a causa del chocolate, así como a causa del café, te, o bebidas cola.
Todas estas sustancias tienen metilxantinas, que son químicos estimulantes del Sistema Nervioso Central (SNC), de hecho son los que producen el efecto que buscamos en cada una de esos alimentos cuando los consumimos. La teobromina, por ejemplo, presente en el chocolate es una droga que relaja los músculos y nos aumenta el ritmo cardíaco. Tiene efectos similares a otras sustancias que liberamos cuando estamos enamorados, y por eso se suele asociar el chocolate con las relaciones de pareja. La cafeína, también es considerada una droga psicoactiva y estimulante del SNC.
Sucede que los perros no pueden disfrutar de las metilxantinas como nosotros, porque tienen una tasa de metabolización demasiado lenta. Pequeñas cantidades de chocolate como una barra de 80 gramos, pueden provocar en un perro mediano vómitos, diarrea, taquicardia, temblores musculares, hiperactividad, y con unas barritas más, incluso la muerte. Un doctor dice claramente que:
La ingestión de 300 g de chocolate en un perro salchicha le provocó muerte súbita y en un perro Springer Spaniel Inglés le provocó la muerte después de 12 hs. de haber consumido 250 g de cacao casero.
Una forma de medir el potencial de toxicidad de una sustancia, es con la medida LD50, que hace referencia a la dosis que resulta letal por lo menos para el 50% de los animales con quienes se experimenta. En los perros, la cantidad LD50 de teobromina de sólo 100mg por cada kilo que pese el animal. Por lo que una barra de chocolate cocido de sólo 42 gramos, que posee 1,2% de teobromina, tiene 520 mg de la droga, lo suficiente para matar un pequeño perro de 5kg.
Como decíamos que tiene una metabolización muy lenta, los síntomas pueden aparecer luego de cinco horas de la ingesta, y no hay ningún antídoto, más que provocarles el vómito y hacerles un lavado gástrico para evitar que se siga absorbiendo.
Diferentes fuentes hablan de distintas cantidades y porcentajes, supongo que cada uno habrá matado diferentes perros para llegar a esas conclusiones, y no voy a entrar en un debate sobre la moralidad de estos experimentos que realmente desconozco.
Pero todos se mantienen en estas pequeñas cantidades. Tampoco es para preocuparse mucho si consumen accidentalmente un trocito que cayó al suelo, pero definitivamente no podemos usar chocolate para premiarlos (ya que les gusta mucho, como todas las cosas dulces), y si tenemos un perro que se come todo, mejor dejar el chocolate bien guardado. De todas maneras, si su perro se come una caja entera de bombones, recomiendo que llamen al veterinario lo más antes posible, y no intenten nada que no les diga. Y sobre todo, no os guiéis al pie de la letra de lo que digo aquí, ya que lo he escrito yo, y no soy ni médico ni veterinario.
3 comentarios:
lol bueno yo tenga una gata... espero que no la pase nada xD aunque parezca inverosimil, la encanta los espaguetis jajajajaja
Les molesta elperro del vecino? denle un cofler y queda patas para arriba jajajajaj!
a el perro de mi abuela es mas caprichoso, le das un trozo de carne de cordedo ( cocinada claro) y un dia le gusta y otro dia ya no. es muy raro. y hay dias que come y otros que no.
yo ya no lo entiendo, quizas es la edad pues tiene 17 años el joni vivemucho. en edad humana serian con unos ciento y pico.
es viejo y por suerte no de esos cascarabias eso si muy complicado con la comida pero muy alegre y con ganas de vivir.
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